sábado, 14 de octubre de 2017

El circuito respiratorio

 A modo de recuerdo, mencionar que el ciclo respiratorio consta de dos momentos esenciales: la salida del aire -espiración- y la captación de ese aire -inspiración-. Es necesario que el ciclo sea completo para poder captar el oxígeno y eliminar el CO2 de nuestro cuerpo ya que este último no nos aporta ningún beneficio. Para que la respiración sea lo más eficaz posible, debe iniciarse por la nariz para que el aire ya tenga una temperatura superior a la del exterior, cuando llegue a los pulmones, y la espiración se hace por la boca. Cuando no es así, interfiere en la eficacia.   Además de conocer cuál es el circuito correcto, hay que tener en cuenta que para inspirar y espirar se necesitan de una serie de músculos que ayudan y que permiten, sobre todo en momentos de elevada exigencia el ejercicio, una adecuada respiración. El diafragma es el que permite con sus movimientos que los pulmones (situados justo encima) se expandan y se contraigan. Cuando éste se contrae, los pulmones sufren presión y, por tanto, el aire tiende a salir, mientras que en la espiración sucede todo lo contrario. Junto al diafragma intervienen otros músculos que se denominan accesorios como los intercostales y otros que en un principio puede parecer que no tienen ninguna relación con la respiración, pero sí la tienen, como los del abdomen. Cabe destacar que la cavidad torácica queda delimitada por el diafragma pero que la cavidad abdominal justo por debajo de ésta también tiene un conjunto de músculos que la delimitan siendo éstos los del suelo pélvico, que tienen también relación con la respiración.   Trabajar con el diafragma  Utilizar uno u otro de estos músculos va a permitir que la respiración sea más eficiente. Cuando solo utilizamos los músculos intercostales estamos haciendo un gran esfuerzo y la cantidad de aire que vamos a conseguir será menor, si la comparamos con la respiración diafragmática. En este caso al hinchar el abdomen entra aire en una mayor superficie pulmonar. No siempre se conocen las técnicas para trabajar la musculatura diafragmática por lo que si se es deportista es importante conocer los métodos para trabajar con el diafragma. Dependiendo del tipo de ejercicio/deporte que se practique se recomiendan técnicas diferentes: En ejercicios de fuerza: es importante que existan una elevada conciencia del ciclo respiratorio e integrarlo al movimiento. Se recomienda inspirar en la relajación y espirar en el momento del esfuerzo máximo. En ejercicios aeróbicos continuos: intentar que se complete el ciclo de inhalación por la nariz y espiración por la boca usando tanto la respiración intercostal como diafragmática. Estiramientos: inspirar en el primer movimiento u espirar cuando estamos en el momento de máximo estiramiento.

1 comentario:

  1. El que se crea que realizar una casi perfecta respiración como se describe aquí es fácil,puede que se equivoque o yo no tengo la habilidad de aprender esto que ya me costaba cuando hacía yoga.

    ResponderEliminar