La Real Academia Española quiere abrir una academia de sefardí en Israel. El objetivo es preservar la lengua que hablaban los judíos expulsados de España por los Reyes Católicos, actualmente en extinción.
Para algunos el café hay que tomarlo amargo. Para que tenga todo y sólo su sabor. El sabor que vuelve de dentro, trago a trago, y se paladea. Desde lo más hondo de uno mismo. Marcados por el éxito de nuestros quehaceres, un café alivia y corona "la disgregación de cada día, las horas largas y nuestras costumbres vanas". Tal vez, sea también nuestra vida. Esa que tú y yo sabemos y que te invito a desgranar aquí.
Pues si la Real Academia Española quiere que la lengua sefardí que hablaban los judíos en España cuando fueron expulsados por los Reyes Católicos no se extinga,pues debe ser una buena idea.
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